¿Quienes somos y porqué lo somos?

Duitama-Boyacá
SOMOS UNA COMUNIDAD DE HOMBRES, MUJERES Y NIÑOS CATÓLICOS COMPROMETIDOS CON JESUCRISTO, CON LA IGLESIA Y SOBRE TODO CON LAS PERSONAS MÁS NECESITADAS DE DIOS. LLEVAMOS LA BUENA NUEVA DEL AMOR DE DIOS A DONDE SE NOS SOLICITA.
¿Quieres saber más?[Descripción]

"Ustedes son la sal de la tierra. Pero si la sal deja de ser sal, ¿cómo podría ser salada de nuevo? Ya no sirve por lo que se tira afuera y es pisoteada por la gente. Ustedes son la luz del mundo, ¿cómo se puede esconder una ciudad asentada sobre un monte? Mt 5, 13-14"

INFORMACIÓN

LA BIBLIA CON BUSCADOR ONLINE, REVISA EL SIGUIENTE LINK LA BIBLIA O HAZ CLICK EN LA IMAGEN DE LA BIBLIA EN LA COLUMNA DE LA DERECHA

sábado, 23 de julio de 2011

Lecturas Santa Misa 24/07/11

Domingo XVI del Tiempo Ordinario Ciclo A



Primera Lectura: 1 Reyes 3, 5.7-12

Salmo responsorial
Sal 118, 57 y 72. 76-77. 127-128. 129-13ó (R.: 97a)

R. ¡Cuánto amo tu voluntad, Señor!


Segunda Lectura: Romanos 8, 28-30

Evangelio:

+ Lectura del santo evangelio según san Mateo 13, 44-52

En aquel tiempo, dijo Jesús a la gente:

-«El reino de los cielos se parece a un tesoro escondido en el campo: el que lo encuentra lo vuelve a esconder y, lleno de alegría, va a vender todo lo que tiene y compra el campo.

El reino de los cielos se parece también a un comerciante en perlas finas que, al encontrar una de gran valor, se va a vender todo lo que tiene y la compra.

El reino de los cielos se parece también a la red que echan en el mar y recoge toda clase de peces: cuando está llena, la arrastran a la orilla, se sientan, y reúnen los buenos en cestos y los malos los tiran.

Lo mismo sucederá al final del tiempo: saldrán los ángeles, separarán a los malos de los buenos y los echarán al horno encendido. Allí será el llanto y el rechinar de dientes.

¿Entendéis bien todo esto?»
Ellos le contestaron:
-«Sí.»
Él les dijo:


-«Ya veis, un escriba que entiende del reino de los cielos es como un padre de familia que va sacando del arca lo nuevo y lo antiguo. »


sábado, 16 de julio de 2011

Lecturas Santa Misa 17/07/11

Domingo XVI del Tiempo Ordinario Ciclo A





Primera Lectura: Sabiduría 12, 13. 16-19

Salmo responsorial
Sal 85, 5-6. 9-10. 15-16a (R.: 5a)

R. Tú, Señor, eres bueno y clemente.

Segunda Lectura: Romanos 8, 26-27

Evangelio:

Lectura del santo evangelio según san Mateo 13, 24-43

En aquel tiempo, Jesús propuso otraparábola a la gente:

-«El reino de los cielos se parece a un hombre que sembró buena semilla en su campo; pero, mientras la gente dormía, su enemigo fue y sembró cizaña en medio del trigo y se marchó. Cuando empezaba a verdear y se formaba la espiga apareció también la cizaña. Entonces fueron los criados a decirle al amo:

"Señor, ¿no sembraste buena semilla en tu campo? ¿De dónde sale la cizaña?"

Él les dijo:
"Un enemigo lo ha hecho."

Los criados le preguntaron:
"¿Quieres que vayamos a recogerla?
Pero él les respondió:

"No, que, al arrancar la cizaña, podríais arrancar también el trigo. dejadlos crecer juntos hasta la siega y, cuando llegue la siega, diré a los segadores:

<>

Les propuso esta otra parábola:

-«El reino de los cielos se parece a un grano de mostaza que uno siembra en su huerta; aunque es la más pequeña de las semillas, cuando crece es más alta que las hortalizas; se hace un arbusto más alto que las hortalizas, y vienen los pájaros a anidar en sus ramas.»

Les dijo otra parábola:

-«El reino de los cielos se parece a la levadura; una mujer la amasa con tres medidas de harina, y basta para que todo fermente.»

Jesús expuso todo esto a la gente en parábolas y sin parábolas no les exponía nada.

Así se cumplió el oráculo del profeta:

«Abriré mi boca diciendo parábolas, anunciaré lo secreto desde la fundación del mundo.»

Luego dejó a la gente y se fue a casa. Los discípulos se le acercaron a decirle:

-«Acláranos la parábola de la cizaña en el campo.»
Él les contestó:

-«El que siembra la buena semilla es el Hijo del hombre; el campo es el mundo; la buena semilla son los ciudadanos del reino; la cizaña son los partidarios del Maligno; el enemigo que la siembra es el diablo; la cosecha es el fin del tiempo, y los segadores los ángeles.

Lo mismo que se arranca la cizaña y se quema, así será al fin del tiempo: el Hijo del hombre enviará a sus ángeles, y arrancarán de su reino a todos los corruptores y malvados y los arrojarán al horno encendido; allí será el llanto y el rechinar de dientes. Entonces los justos brillarán como el sol en el reino de su Padre. El que tenga oídos, que oiga. »




Lecturas Santa Misa 10/07/11

DOMINGO XV DEL TIEMPO ORDINARIO

PRIMERA LECTURA: Lectura del libro de Isaías 55, 10-11

Salmo responsorial
Sal 64, 10. 11. 12-13. 14 (R.: Lc 8, 8)

R. La semilla cayó en tierra buena y dio fruto.

SEGUNDA LECTURA: Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Romanos 8, 18-23

EVANGELIO

+ Lectura del santo evangelio según san Mateo 13, 1-23

Aquel día, salió Jesús de casa y se sentó junto al lago. Y acudió a
él tanta gente que tuvo que subirse a una barca; se sentó, y la gente se quedó de pie en la orilla.

Les habló mucho rato en parábolas:

-«Salió el sembrador a sembrar. Al sembrar, un poco cayó al borde del camino; vinieron los pájaros y se lo comieron.

Otro poco cayó en terreno pedregoso, donde apenas tenía tierra, y, como la tierra no era profunda, brotó en seguida; pero, en cuanto salió el sol, se abrasó y por falta de raíz se secó.

Otro poco cayó entre zarzas, que crecieron y lo ahogaron.

El resto cayó en tierra buena y dio grano: unos, ciento; otros, sesenta; otros, treinta.

El que tenga oídos que oiga. »

Se le acercaron los discípulos y le preguntaron:
-«¿Por qué les hablas en parábolas?»

Él les contestó:
-«A vosotros se os ha concedido conocer los secretos del reino de los cielos y a ellos no. Porque al que tiene se le dará y tendrá de sobra, y al que no tiene se le quitará hasta lo que tiene. Por eso les hablo en parábolas, porque miran sin ver y escuchan sin oír ni entender. Así se cumplirá en ellos la profecía de Isaías: "Oiréis con los oídos sin entender; miraréis con los ojos sin ver; porque está embotado el corazón de este pueblo, son duros de oído, han cerrado los ojos; para no ver con los ojos, ni oír con los oídos, ni entender con el corazón, ni convertirse para que yo los cure."
¡Dichosos vuestros ojos, porque ven, y vuestros oídos, porque oyen! Os aseguro que muchos profetas y justos desearon ver lo que veis vosotros y no lo vieron, y oír lo que oís y no lo oyeron. Vosotros oíd lo que significa la parábola del sembrador:

Si uno escucha la palabra del reino sin entenderla, viene el Maligno y roba lo sembrado en su corazón. Esto significa lo sembrado al borde del camino.

Lo sembrado en terreno pedregoso significa el que la escucha y la acepta en seguida con alegría; pero no tiene raíces, es inconstante, y, en cuanto viene una dificultad o persecución por la palabra, sucumbe.

Lo sembrado en zarzas significa el que escucha la palabra; pero los afanes de la vida y la seducción de las riquezas la ahogan y se queda estéril. Lo sembrado en tierra buena significa el que escucha la palabra y la entiende; ese dará fruto y producirá ciento o sesenta o treinta por uno.

sábado, 2 de julio de 2011

Lecturas Santa Misa 03/07/2011



DOMINGO XIV DEL TIEMPO ORDINARIO -- Ciclo A



PRIMERA LECTURA: Zacarías 9, 9-10

Salmo responsorial
Sal 144, 1-2. 8-9. 10-11. l3cd-14 (R.: cf. 1)

R. Bendeciré tu nombre por siempre, Dios mío, mi rey.

SEGUNDA LECTURA: Romanos 8, 9. 11-13

EVANGELIO:
+ Lectura del santo evangelio según san Mateo 11, 25-30


En aquel tiempo, exclamó Jesús: '-«Te doy gracias, Padre, Señor de cielo y tierra, porque has escondido estas cosas a los sabios y entendidos y se las has revelado a la gente sencilla. Si, Padre, así te ha parecido mejor. Todo me lo, ha entregado mi Padre, y nadie conoce al Hijo más que el Padre, y nadie conoce al Padre sino el Hijo, y aquel a quien el Hijo se lo quiera revelar. Venid a mi todos los que estáis cansados y agobiados, y yo os aliviaré. Cargad con mi yugo y aprended de mi, que soy manso y humilde de corazón; y encontraréis vuestro. descanso. Porque mi yugo es llevadero y mi carga ligera.»